El Departamento de Psiquiatría y Salud Mental Norte trabaja en la implementación de distintas estrategias que permitan relevar su rol en la formación de pregrado de la Universidad de Chile. Su directiva, encabezada por el doctor Pablo Gaspar, ha puesto en marcha acciones que buscan fortalecer los espacios de docencia en el campus, donde la Clínica Psiquiátrica Universitaria tiene a cargo el curso de psiquiatría para estudiantes de quinto año de medicina, así como una oferta de internados, pasantías y prácticas.
Con ese fin se ha estableció una nueva orgánica en la coordinación de pregrado y postgrado del claustro académico del departamento. “Una de las estrategias es convocar a distintas escuelas de la Facultad de Medicina, algo que consideramos crucial para promover la docencia en salud mental. Creemos que uno de los pilares para esto es la docencia multidisciplinaria”, explica el doctor Gaspar.
De esta forma el psiquiatra Enzo Rozas, nuevo coordinador de pregrado en la CPU, explica que estás mejoras no sólo tendrán un impacto en la formación de futuros profesionales, sino también en usuarios y usuarias de clínica: “Integrar internos y practicantes de diversas carreras de la salud nos permite mejorar la oferta asistencial. Por ejemplo, estamos trabajando en incluir más estudiantes de terapia ocupacional quienes, bajo supervisión, tienen contacto con los pacientes. Esto aporta directamente en su proceso formativo, pero también implica más tiempo disponible para el usuario/a”, expone.
La dirección es optimista respecto a la recepción de propuestas y la participación de las distintas carreras de la facultad. “Además de Kinesiología y Terapia Ocupacional, con quienes ya acordamos acciones, hemos extendido la invitación a otras carreras”, reconoce el doctor Rozas. En ese sentido, agrega que “hemos tenido una excelente recepción por parte de las direcciones de escuela. La salud mental es un gran tema, la gente cada vez se atreve más a consultar y las nuevas generaciones reconocen su importancia, tanto en lo profesional como en lo personal. Generar cursos, capacitaciones y fortalecer el campo clínico son acciones que pueden tener un gran impacto en la formación de profesionales competentes y sensibilizados respecto a los desafíos del área”.
Docencia de pregrado
En los últimos años la salud mental se ha convertido en un tema de interés a nivel institucional en la Universidad de Chile, motivando acciones para su abordaje desde distintas perspectivas y espacios. Sin ir más lejos, hace algunos meses la doctora Viviana Guajardo, quien también es coordinadora de Gestión y Planificación en la CPU, asumió como encargada de la estrategia de salud mental de la Facultad de Medicina.
El doctor Gaspar reconoce esto y explica: “Nuestra propuesta contempla articularnos con las estrategias de salud mental que están llevando a cabo la Facultad y el Hospital Clínico. La CPU debe convertirse en un referente de estos planes y, además, establecer nexos con otras facultades de la universidad, como las que integran el Campus Eloísa Díaz y la Facultad de Ciencias Sociales. Esta diversidad enriquece nuestro quehacer, tanto para el estudiantado como para el cuerpo docente”
Sobre esto y respecto a los nuevos desafíos, el doctor Rozas comenta que “de esta forma queremos fortalecer la figura de la CPU como campo clínico, con la idea de que sea cada vez más abierto e involucre a otras carreras”. “Como clínica tenemos estos dos ámbitos de acción: la CPU es el Campus Psiquiatría Norte, pero también un campo clínico y asistencial. Reforzar el diálogo entre ambos planos es importante para entender la salud mental como un espacio multidisciplinario donde interactúan distintas carreras de la salud”, agrega el psiquiatra.
Instancias de formación
La malla curricular del quinto año de la carrera de medicina incluye el curso de Psiquiatría, que involucra de forma unificada a las tres sedes de la escuela. Además, en séptimo año los estudiantes cursan el internado de la especialidad, con una duración de tres a cuatro semanas. Para ambas instancias se contempla el desarrollo de programas educativos especializados, el establecimiento de prácticas clínicas intensivas y la colaboración con expertos en salud mental para enriquecer el contenido académico.
El doctor Rozas comenta los avances en esto; “en conjunto con la carrera de Medicina hemos logrado reformular varios aspectos del internado de Psiquiatría en la sede Norte, lo que implica reforzar y sistematizar los seminarios y las actividades de docencia, tanto teóricas como aquellas en las que se involucra práctica con pacientes”, explica.
Además, la CPU ha reforzado la participación del claustro académico del departamento e incorporado a nuevos profesionales, como el doctor Felipe Alarcón, quien cuenta con vasta experiencia en docencia y este año estará a cargo del curso de quinto año, integrando nuevos enfoques, expositores y actividades.
El doctor Pablo Gaspar valora estos cambios, señalando que “queremos que nuestros y nuestras estudiantes comprendan la relevancia de la salud mental y estén preparados para abordar estos temas desde sus diversas áreas profesionales. Además, que nuestros académicos sigan actualizándose en la pedagógica universitaria. Para eso destinamos espacios en nuestras reuniones clínicas, para abordar temas como buenas prácticas docentes y nuevas herramientas docentes en salud mental”, declara.
Internado en la CPU
Sobre el mencionado internado por el que pasan los y las estudiantes de pregrado, el doctor Rodrigo Nieto, profesor encargado del plan, explica que “el diseño actual del internado de Psiquiatría en el Campus Norte comprende una rotación por Psiquiatría de Adultos, con la profesora María Angélica Montenegro como coordinadora, y otra por Psiquiatría Infanto-Juvenil, con la profesora Macarena Díaz en el cargo”, comenta.
“Parte fundamental de este plan de fortalecimiento es el internado de Psiquiatría, algo que siempre ha existido pero queremos fortalecer, para estructurar la participación y rotación de estudiantes”, acota el doctor Rozas.
El doctor Nieto profundiza sobre el contenido de este proceso, dando a conocer que “durante las rotaciones se refuerzan contenidos fundamentales mediante seminarios teórico-prácticos guiados por académicos de la Clínica Psiquiátrica Universitaria. A la vez, se cuenta con espacio para que los internos observen de forma presencial la atención de pacientes y participen de las discusiones clínicas al respecto”, comenta.
Para este espacio han sumado a la doctora Viviana Miño, psiquiatra con experiencia en docencia, quién ayudará a fortalecer el trabajo con pacientes y a sistematizar los seminarios teóricos que curse la comunidad interna. “La incorporación de la dra. Miño ha sido de gran importancia para contar con un espacio y tiempo protegido para que los internos puedan participar de la entrevista a pacientes y discusión de casos clínicos, algo fundamental en su etapa de formación”, finaliza el doctor Nieto.
Por su parte, el doctor Gaspar ve con optimismo los avances ya conseguidos y el trabajo a futuro: “Quiero agradecer a los múltiples académicos del claustro del departamento que han respondido con mucha motivación a esta convocatoria. También destaco el apoyo que hemos recibido desde las diversas escuelas de la facultad y sus autoridades, como son la doctora Thelma Suau, directora de la Escuela de Medicina, y las profesoras Constanza Briceño, de la Escuela de Terapia Ocupacional, y Mónica Manríquez, de Kinesiología”. Cierra diciendo que “estamos muy dispuestos de seguir con esta convocatoria y extenderla a otras escuelas de nuestra facultad”.