Los días 21 y 22 de octubre, en el Auditorio Lorenzo Sazié del Campus Norte de nuestra facultad, se realizó el XIV Congreso de Ergonomía y Factores Humanos, encuentro organizado por el Departamento de Kinesiología y la Sociedad Chilena de Ergonomía y Factores Humanos (SOCHERGO). Con un formato híbrido, la cita convocó a representantes del mundo académico, público y privado, para reflexionar sobre los desafíos actuales de la disciplina en torno a la salud ocupacional, los factores psicosociales, el envejecimiento, la inclusión y el impacto de las tecnologías emergentes.
El encuentro, auspiciado por Kensington y la Mutual de Seguridad, contó con la participación de diversas instituciones y organizaciones, entre ellas: la Superintendencia de Seguridad Social; el Instituto de Salud Pública; la Universidad de Atacama; la Escuela de Salud de la Universidad de O’Higgins; el Departamento de Ergonomía de la Universidad de Concepción; DILab Engineering Design; la Sociedad Chilena de Enfermería en Salud Ocupacional; la Sociedad Chilena de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones; la Sociedad Chilena de Medicina del Trabajo; la Sociedad de Salud Ocupacional de Chile; la Oficina de Educación Médica y la Subdirección de Desarrollo Curricular de la Universidad Bernardo O’Higgins; la Escuela de Diseño de la Pontificia Universidad Católica de Chile, y el Colegio de Kinesiólogos de Chile.
El profesor Giovanni Olivares, académico del Departamento de Kinesiología y maestro de ceremonia, dio la bienvenida al encuentro, destacando el espíritu colaborativo de la instancia, así como su valor como espacio de reunión entre académicos, profesionales y estudiantes comprometidos con la salud y la seguridad laboral. “Es un honor darle la bienvenida a este XIV Congreso y cumplir con esta labor”, expresó, al inaugurar oficialmente la jornada. “Estos dos días son una invitación a reflexionar sobre nuestra relación con el entorno y a fortalecer los lazos entre quienes buscamos que el trabajo sea un espacio más humano, inclusivo y saludable”, añadió.
Avances, inclusión y nuevos enfoques
La primera en dirigir la palabra a los asistentes fue la presidenta de SOCHERGO, Jeisy Cofré, quien resaltó el crecimiento de la disciplina y el rol de la sociedad científica en el fortalecimiento de estándares nacionales: “En Chile hemos avanzado significativamente en regulaciones, pero a veces somos tan exigentes que no percibimos ese avance con claridad. Tenemos un estándar bueno en nuestro país; siempre habrá cosas por mejorar, pero debemos comenzar a ver de qué manera estamos aplicando lo que ya existe”, afirmó.
Asimismo, subrayó el papel transformador de la ergonomía frente a los cambios tecnológicos y culturales que afectan el trabajo contemporáneo. “El desarrollo tecnológico de los últimos años ha cambiado el foco y la dirección de cómo debemos abordar la seguridad y la salud de los trabajadores”, señaló, agregando que la ergonomía “no solo se ocupa de lo físico o musculoesquelético, sino también de los aspectos cognitivos y organizacionales, desde una mirada integral de la persona”.
Uno de los ejes de su mensaje fue la inclusión y diversidad: “Nosotros partimos desde la base de que todos somos distintos. Por eso queremos llegar a que la inclusión no sea tema. La inclusión y la diversidad son parte de nuestras temáticas; no son un elemento aparte, sino parte de lo que vemos normalmente”, enfatizó.
De igual modo, valoró la colaboración entre los actores públicos, académicos y privados que hacen posible el desarrollo de la ergonomía en Chile: “Esta sociedad está compuesta por personas realmente apasionadas por esta disciplina, que quieren hacer que la salud y la seguridad en el trabajo avancen y sean mejores”, afirmó, agradeciendo el compromiso de quienes impulsan esta labor en todo el país.
Encuentro entre la academia, el arte y la salud
Otra de las autoridades que entregó su saludo en la apertura fue el doctor Claudio Tapia, director del Departamento de Kinesiología de la Facultad de Medicina. En su intervención, destacó el carácter integral de la ergonomía y el valor simbólico de realizar el congreso en el histórico Auditorio Lorenzo Sazié: “Este espacio está cargado de historia, de academia y también de arte. El mural de Mario Toral cumplió 20 años hace dos días, y su mensaje nos recuerda que —citando al autor del mural— ‘el principal objetivo de la medicina es que esa fuerza desconocida que se llama alma no abandone el cuerpo’. Los invito a que, en este espacio de dos días, profundicen en esa relación humana”, expresó.
Para el doctor Tapia, la relevancia del congreso trasciende lo disciplinar: “El encuentro a través de este congreso no solo es un encuentro académico, es un encuentro humano. En un congreso existe comunión, encuentro de ideas, un laboratorio para experimentar visiones futuras”, señaló.
El académico subrayó además la responsabilidad de la Universidad de Chile en la promoción del bienestar social: “Es un honor inaugurar este congreso y reafirmar nuestro compromiso con la salud, con la calidad de vida y con el desarrollo de una sociedad más justa”, afirmó. “Este espacio de reflexión y diálogo permitirá generar nuevos liderazgos, conexiones y espacios de trabajo que transformen el futuro y contribuyan a una mejor sociedad”, concluyó.
Ergonomía, investigación y futuro
Por su parte, la doctora Carolina Rodríguez, académica del Departamento de Kinesiología y presidenta del comité científico del congreso, destacó la importancia del evento como punto de encuentro nacional y latinoamericano: “Este congreso no solo representa una oportunidad para compartir conocimientos, sino también para fortalecer los lazos que nos unen como comunidad comprometida con el bienestar humano”, señaló.
La académica valoró el trabajo colaborativo detrás de la organización: “Nuestro comité científico ha trabajado con dedicación para asegurar que este programa refleje la diversidad de enfoques, metodologías y experiencias que enriquecen nuestra disciplina”, comentó.
Además, proyectó la labor académica hacia el futuro: “Sigamos dando espacio desde la investigación en terreno y apoyados desde la academia con el desarrollo de estudios de posgrado que lleven la investigación hacia ámbitos más específicos, contextualizando la realidad de la ergonomía y el factor humano”, expresó.
La investigadora invitó a continuar construyendo una comunidad científica activa y vinculada con el país: “Dejamos las puertas abiertas desde nuestra casa de estudios, con el Laboratorio de Ergonomía, para continuar desarrollando una actividad científica fructífera que acompañe y respalde el crecimiento disciplinar de la ergonomía y los factores humanos, tanto en Chile como en la región”.
Una mirada integral al trabajo y la salud
Finalmente, el subsecretario de Previsión Social del Ministerio de Trabajo y Previsión Social, Claudio Reyes, quien asistió al congreso en representación del ministro Giorgio Boccardo, valoró la alianza entre el Estado, la academia y las sociedades científicas, y destacó el papel de la ergonomía en las transformaciones del trabajo contemporáneo: “La ergonomía no es solamente una disciplina técnica o científica, se trata de una mirada integral sobre el trabajo que pone en el centro a las personas, su bienestar, su entorno y sus capacidades”, señaló.
De igual modo, advirtió sobre los desafíos que trae la digitalización y la inteligencia artificial: “Este mundo laboral está cambiando vertiginosamente. La tecnología es una amenaza y al mismo tiempo una oportunidad. Podemos verlo en la composición de nuestras enfermedades profesionales: hace tiempo que las enfermedades mentales ocupan el primer lugar por sobre las musculoesqueléticas”, explicó.
En ese contexto, destacó las iniciativas legislativas y preventivas impulsadas por el ministerio: “Hemos actualizado la Política Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo con un enfoque de género, participación y derechos, instalando una cultura preventiva más sólida, moderna y participativa. También hemos fortalecido los comités paritarios e impulsado la ergonomía participativa como pilar de mejora continua en los lugares de trabajo”.
El subsecretario relevó la necesidad de integrar la salud mental como eje del bienestar laboral. “Construir herramientas que cuiden la salud mental sin frenar la innovación es uno de los desafíos más importantes que tenemos como país. No basta con prevenir: debemos proteger el bienestar emocional y social de los trabajadores”, afirmó.
Para concluir, destacó la pertinencia del congreso: “Este encuentro representa la convergencia entre ciencia, política y trabajo presente, con la seguridad laboral y la construcción de una cultura preventiva sólida y participativa”.
Con proyección nacional y latinoamericana, el XIV Congreso de Ergonomía y Factores Humanos se proyecta como una instancia de encuentro y generación de conocimiento aplicado al bienestar de las personas trabajadoras y a la mejora de las condiciones laborales en el país. A su vez, la ergonomía se consolida como una disciplina clave para enfrentar los desafíos del siglo XXI, impulsando un futuro del trabajo centrado en la dignidad, la innovación y el bienestar integral.