El galardón, que será entregado el próximo 3 de diciembre en Ciudad de México, durante la Conferencia MOOC Global 2025 destaca la innovación pedagógica de la asignatura y el uso de inteligencia artificial (IA) para personalizar el aprendizaje y promover la equidad educativa.
La creación del curso "Bases Matemáticas para las Ciencias de la Salud y Biomédicas" surge como una respuesta directa a las brechas de aprendizaje en conocimientos matemáticos detectadas entre la educación secundaria y las exigencias de los cursos de ciencias básicas en las ocho carreras de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile (FMUCH). La materia fue diseñada en colaboración con la Plataforma de Educación Online (EOL) de la Vicerrectoría de Tecnologías de la Información (VTI) y con soporte en U-Cursos.
“Esta asignatura nos ha permitido personalizar la experiencia educativa a gran escala sin perder el sello formativo ni la exigencia académica. Es la manera responsable de acoger cohortes diversas, tanto en ritmos de aprendizaje, experiencias previas y contextos”, destacó la profesora Caroll Cuéllar, coordinadora de la mencionada unidad y una de las impulsoras del proyecto.
La académica subrayó además que el reconocimiento “valida una forma de entender la docencia universitaria: interdisciplinaria, colaborativa y comprometida con el bien público”. Además, “representa un modelo donde la tecnología se pone al servicio de la equidad, y donde la IA y las herramientas digitales permiten personalizar la enseñanza y ofrecer acompañamiento formativo a cientos de estudiantes en su primer año”, añadió.
Un modelo innovador de nivelación y acompañamiento
Cada año, la Facultad de Medicina recibe a estudiantes de perfiles muy diversos provenientes de distintas trayectorias educativas. Con el fin de ofrecerles un espacio de nivelación y refuerzo en matemáticas, la Dirección de Pregrado, a cargo de la profesora Marcela Díaz, junto con la Unidad de Biomatemáticas y EOL, diseñaron este curso autoadministrado especialmente para las y los estudiantes de la cohorte 2025.
“Nuestra expectativa era ofrecer un dispositivo de preparación previa al ingreso a la facultad que fuese efectivo, amable y justo: efectivo, porque debía mover la aguja en los aprendizajes; amable, porque buscaba reconstruir la confianza y disminuir la ansiedad matemática; y justo, porque el enfoque debía adaptarse a cada persona y no obligar a todos a una misma ruta”, explicó Cuéllar.
Desde la Dirección de Pregrado, la profesora Marcela Díaz destacó el valor institucional y académico del reconocimiento obtenido por la Unidad de Biomatemáticas: “Queremos expresar nuestras más sinceras felicitaciones. Este prestigioso reconocimiento internacional celebra la excelencia en la integración de la tecnología digital en la enseñanza”, mencionó.
La directora de pregrado también destacó el innovador diseño instruccional de la cátedra, así como la motivación detrás de su creación. “El curso que diseñamos en conjunto como una respuesta innovadora y necesaria para la nivelación de nuestros estudiantes, ha demostrado ser un referente global. Felicitamos a todo el equipo por este merecido logro que nos enorgullece como facultad y como dirección”.
El curso busca que las y los estudiantes dejen de percibir la matemática como una barrera abstracta y comiencen a verla como una herramienta profesional fundamental para comprender datos clínicos, interpretar gráficos, estimar proporciones, modelar procesos y argumentar con evidencia.
La innovación tecnológica es uno de los pilares del curso. Integra recursos interactivos como Genially y H5P, además de retroalimentación automática en las evaluaciones formativas, lo que fomenta el aprendizaje autorregulado. En cada módulo se registraron más de 100 entregas estudiantiles, entre infografías y casos aplicados, que evidencian el avance y la apropiación de contenidos.
Uno de los elementos más destacados fue el uso de IA para el codesarrollo de rúbricas de evaluación, lo que permitió entregar retroalimentación formativa y consistente a cerca de 400 evaluaciones, garantizando criterios comunes y tiempos razonables de respuesta a gran escala.
“En un país con desafíos en matemática, este curso es también un acto de cuidado académico. El formato online nos permite flexibilizar tiempos, diversificar apoyos y acompañar trayectorias. Nuestro curso pretende ser un puente para que todas y todos lleguen mejor preparados a los cursos de matemáticas de primer año”, agregó Cuéllar.
Reconocimiento global y proyección institucional
El premio otorgado por GMA —red internacional integrada por la UNESCO y universidades líderes en educación digital— reconoce la excelencia en la integración de tecnología en la enseñanza y el aprendizaje STEM. Para la profesora Cuéllar, este galardón “representa una validación global de excelencia en educación digital, la inserción de nuestro trabajo en una comunidad internacional de vanguardia y una oportunidad estratégica para la Unidad de Biomatemáticas de la Facultad de Medicina”.
El proceso de selección consideró la evaluación por un panel internacional compuesto por representantes de la UNESCO, instituciones académicas de prestigio, plataformas de educación en línea y estudiantes. “Poder compartir con profesionales y conocer proyectos de otras latitudes enriquece nuestro quehacer y nos desafía a seguir mejorando la enseñanza online”, señaló Darío Riquelme, subdirector de la Plataforma EOL.
El logro también destaca el trabajo del equipo docente y técnico detrás del proyecto: la académica Ingrid Galaz, profesora de Matemáticas e Informática Educacional y magíster en Pedagogía Universitaria, quien lideró el diseño instruccional y la creación de materiales didácticos interactivos; y el profesor Alexander Riquelme, ingeniero en Biotecnología y estudiante de doctorado en Ciencias, quien aportó en la validación biomédica de los contenidos. El diseño visual y técnico estuvo a cargo de Marcelo Parra, de la Plataforma EOL.
Este esfuerzo conjunto consolida el curso como una estrategia de apoyo académico y nivelación alineada con el modelo educativo de la Universidad de Chile, que sitúa la inclusión y la calidad en el centro del proceso formativo.