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Las y los ganadores del Fondo Valentín Letelier 2025

En la Plataforma Cultural del Campus Juan Gómez Millas

U. de Chile presenta libro por los 15 años del Fondo Valentín Letelier

Este lunes 22 de diciembre, la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones de la Universidad de Chile realizó la ceremonia de premiación del Fondo Valentín Letelier 2025. Además, se realizó la presentación del libro “Fondo Valentín Letelier: 15 años de compromiso público”, que recoge la historia, evolución e impacto de este fondo concursable.

Con innovador proyecto de IA y salud

Equipo FMUCH representará a la región en Google California

La Facultad de Medicina de la Universidad de Chile (FMUCH) ha alcanzado un hito histórico en la integración tecnológica tras ser seleccionada como finalista del prestigioso desafío "AI and Education - LATAM Challenge", organizado por Google for Education. El equipo responsable del proyecto viajará en abril de 2026 a las oficinas centrales de la tecnológica en Mountain View, California, para presentar el "FAMED AI Learning Hub".

La profesora Carmen Julia Coloma durante el análisis del instrumento denominado TEPROSIF

Es una primera colaboración

SLEP Barrancas actualiza a sus fonoaudiólogos y fonoaudiólogas

La jornada de Actualización “Aplicación y análisis de los instrumentos del decreto 170 del Ministerio de Educación” contó con la participación de aproximadamente 50 profesionales de esta disciplina, quienes renovaron conocimientos y habilidades para el uso de instrumentos de evaluación fonoaudiológica en niños de entre tres y siete años de edad.

Entre el prejuicio y la evidencia

Salud mental adolescente y videojuegos: del estigma a la ciudadanía digital

En un país donde la hiperconectividad supera el número de habitantes, el impacto de los videojuegos en la niñez y adolescencia se ha convertido en un desafío crítico de salud mental. Según el psicólogo Gabriel García, la clave para enfrentar este fenómeno no reside en la prohibición, sino en un acompañamiento activo que permita diferenciar el uso recreativo de la patología.

En la Gran Sala Sinfónica Nacional se ofreció el oratorio “El Mesías” de Händel, interpretado por la Orquesta y Coro Sinfónico de la Universidad de Chile

Un homenaje de la Facultad de Medicina de la U. de Chile al personal de salud

Concierto “Memoria, esperanza y comunidad, a cinco años de la pandemia”

La Facultad de Medicina de la Universidad de Chile brindó un concierto conmemorativo como un reconocimiento a los trabajadores sanitarios que estuvieron en la primera línea de atención a los pacientes, quienes con vocación y compromiso hicieron posible seguir cuidando la vida en medio de la incertidumbre provocada por el Covid19.

La profesora Zulema de Barbieri fue entrevistada en el escenario por la profesora Claudia Araya, por lo que pudo profundizar en lo que fue su decisión vocacional, así como en su desarrollo profesional, académico y docente

Día de Fonoaudiología:

Una historia que mira al futuro

Durante el encuentro se homenajeó a académicos y funcionarios por sus años de servicio, así como a quienes representan parte de la historia viva de la disciplina: las profesoras María Mercedes Pavez y Zulema de Barbieri, así como el secretario David Vergara.

La rectora de la Universidad de Chile, doctora Rosa Devés, y el decano de la Facultad de Medicina, doctor Miguel O'Ryan, hacen entrega de la distinción de profesor emérito a los doctores Fernando Cassorla y Giorgio Solimano

Doctores Fernando Cassorla y Giorgio Solimano, nuevos Profesores Eméritos

Protagonistas del desarrollo de la Universidad de Chile

En una ceremonia solemne realizada el 12 de diciembre de 2025, quienes dirigieron unidades tan importantes para nuestro plantel como el Instituto de Investigaciones Materno Infantil, IDIMI, y la Escuela de Salud Pública Doctor Salvador Allende, fueron reconocidos por su contribución al saber superior y a la formación de generaciones de nuevos especialistas.

Estudio de la Universidad de Chile es el más grande a nivel continental

Cuidado de las demencias: muestra de desigualdad social

Cuidado de las demencias: muestra de desigualdad social

Los datos fueron analizados en colaboración con los economistas Daniel Hojman, Fabián Duarte y Jaime Ruiz Tagle, de la Facultad de Economía y Negocios; con las doctoras Carolina Delgado, del Hospital Clínico institucional y Marilú Budnich, y publicados en la revista PLoS One a mediados de marzo de 2016

Según explica, el estudio se realizó sobre 330 adultos con algún grado de síndrome demencial adquirido, no sólo Alzheimer, y sus respectivos cuidadores informales, a los cuales se aplicó la encuesta Resource Utilization in Dementia o RUD-Lite –de estandarización internacional, lo que permite la comparación con otros países-, además de otra encuesta para determinar su nivel socioeconómico.

Los datos entregados por los encuestados respecto a los gastos en los que se incurre cuando se tiene un familiar con alguna de estas patologías fueron descompuestos en tres grandes tipos y valorizados gracias al apoyo de la Facultad de Economía y Negocios: los gastos directos, que se refieren al gasto en médicos, medicamentos y exámenes clínicos del paciente y del cuidador. Luego están los costos sociales directos, referidos a la compra de servicios en beneficio del paciente, como podría ser la contratación de una enfermera o asistente o la internación en una casa de reposo. Y, por último, los costos sociales indirectos, es decir aquellos que se asocian al cuidador informal: es decir, los investigadores cifraron en dinero la cantidad de horas que esa persona dedica a velar por su pariente enfermo según las labores que realiza, considerando tres dimensiones: cuidado personal básico, apoyo en actividades de tipo instrumental, como la toma de medicamentos, y su supervisión general para prevenir accidentes.

Ingresos de país rico, costos de pobre

Esta cuantificación de costos fue analizada, paralelamente, en función del nivel socioeconómico de los entrevistados, organizados en cuatro niveles: alto, medio alto, medio bajo y bajo.

De esta manera, determinaron que el costo de la demencia por paciente, en promedio, es de 1.463 dólares mensuales, es decir 975 mil mensuales por paciente. “El desglose de este promedio indica que en los estratos socioeconómicos altos este costo es de 1.083 dólares mensuales y en los más bajos es de 1.588 dólares, lo que es un fuerte componente de injusticia social; la diferencia se explica en que en los primeros la proporción de los costos indirectos alcanza a un 58%, siendo que en los bajos llega a un 79%. Entre las familias de escasos recursos refieren destinar una mayor cantidad de tiempo al cuidado del paciente que entre la gente de ingresos mayores”, añade la investigadora. De hecho, mientras el tiempo destinado por familiares del segmento más alto equivale a US$659 mensuales, el de menores ingresos suma US$1.273. El mayor tiempo destinado al cuidado se ve incrementado, además, porque en el segmento de bajos recursos las demencias son más severas y la carga para la salud mental del cuidador es mayor, agrega la doctora Slachevsky.

Del costo total, 20% se destina a fármacos, atención médica y exámenes y 5% corresponde al pago de cuidadores formales o instituciones que proveen estos cuidados. El 75% restante se explica por el tiempo que destinan al cuidado del paciente los cuidadores informales, como familiares, amigos o vecinos, que no reciben remuneración por desempeñar este rol y que, en muchos casos, deben abandonar su trabajo o restarle varias horas a la semana.

Otra situación paradojal, pues no tiene correlato en cuanto a los costos sociales directos en los que podrían invertir los sectores con mayores recursos, se refiere a que “el gasto médico entre las personas de ingresos altos es de $127.000 mensuales, versus $92.000 mensuales entre las más vulnerables; la diferencia no es muy significativa. Pero lo llamativo es que en cuanto al costo social directo, es decir, al gasto en la contratación de servicios de empleada, asistente o de casa de reposo, la diferencia tampoco es importante: el desglose arroja $20.000 mensuales entre los más acomodados y $16.000 entre los con menores ingresos. No tenemos explicación clara aún para esto, pero la evidencia muestra que los cuidadores de niveles socioeconómicos bajos refieren estar mucho más tiempo al cuidado de su familiar con demencia, y ése es uno de los datos más potentes de este estudio; además, esta diferencia no se justifica totalmente por la mayor severidad de las demencias en las personas de estrato socioeconómico bajo”.

Al respecto, la doctora Slachevsky hipotetiza varias causales: que entre los sectores más acomodados haya presencia de una mayor red de apoyo, como otros parientes o terceros a quienes solicitar este cuidado; que por desconocimiento respecto de las demencias, o por estructura de sus hogares, entre las personas más vulnerables se piense que es indispensable acompañar al enfermo durante todo el día y de manera constante, o tengan menos preparación para hacer frente a esta labor. “Estos cuidadores se sienten con menos espacios de libertad, correlacionándose con una mayor sobrecarga de tiempo invertido, lo que aumenta los costos indirectos”.    

Otra de las conclusiones que obtuvieron los científicos es que “según lo registrado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE, somos un país de ingresos altos, pero nuestros números en cuanto a demencia son propios de un país de ingresos bajos, como por ejemplo Afganistán o alguna nación africana”, agrega la académica. Y detalla: “A mayor ingreso como país más aumenta el costo de la demencia. En Chile se invierten 10.980 dólares anuales –parecido a lo que se gasta en países de ingreso medio alto en la región, como Costa Rica-, siendo que en las naciones desarrolladas se gastan 32.865 dólares anuales. Pero la proporción de esos gastos es la diferente: en los países de ingresos altos el 40% del costo de las demencias se atribuye al costo informal; esa cifra acá alcanza el 79% entre la gente más pobre y, en el mejor de los casos, el 58% entre quienes tienen más recursos. Eso refleja que como país no nos estamos haciendo cargo del cuidado de estos pacientes, dejando que sean las familias las que lo asuman”. 

Cecilia Valenzuela León