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En la oportunidad, el Premio Nacional de Ciencias, doctor Jorge Allende, recordó que de los 56 años que lleva de trayectoria académica, ha dedicado los últimos 20 a fomentar la enseñanza de la biología a nivel de educación escolar, conduciendo programas como el de Educación en Ciencias Basado en la Indagación, ECBI; el creado por la Universidad de Chile para el apoyo a los colegios y liceos de las zonas más dañadas por el terremoto de 2010 y, actualmente, el de Laboratorios Portátiles de la Facultad de Medicina. Por ello, añadió, le ha tocado estar en contacto con cientos de profesores de todo el país, conociendo los desafíos y dificultades que deben enfrentar, por lo que señalo que “los científicos tenemos que incentivar una acción conjunta con los profesores de enseñanza básica y media, para que se valore a la ciencia y se establezca un compromiso de desarrollo científico y tecnológico para el país. Tenemos que saldar esa deuda”.
Por ello, la propuesta de creación de una Asociación Nacional para la Educación en Ciencias de la Vida, tendría como miembros a profesores de biología, a académicos universitarios que cultiven las ciencias biológicas y a integrantes de sociedades científicas y de la Academia Chilena de Ciencias. Su objetivo sería promover el mejoramiento de la calidad de la educación en ciencias biológicas en todos los niveles; representar las opiniones de su membresía en temas relacionados ante el gobierno y generar medios de comunicación para difundir avances en el área, entre otros. Además, en cuanto a su relación con las casas de estudios superiores, fomentaría la realización de cursos de capacitación para los profesores, así como la implementación de investigaciones conjuntas. Por último, promovería la colaboración entre sus miembros.
Amplia acogida de la propuesta
De esta manera, la diputada Cristina Girardi, miembro de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, apoyó abiertamente esta iniciativa, en cuanto a que representaría una oportunidad para optimizar la capacitación de los profesores. Además, como ejemplo de la importancia de mejorar la formación escolar, citó las propuestas contenidas en el libro “Enseñar a Vivir, manifiesto para cambiar la educación”, del autor francés Edgar Morin, en el cual se refiere a que necesario detectar las carencias y lagunas de nuestra enseñanza actual para afrontar problemas vitales como los del error, la ilusión, la parcialidad y la comprensión humana.
Rodrigo Iturriaga, profesor de fisiología la Facultad de Ciencias de la Pontificia Universidad Católica de Chile, ahondó en la relevancia de esta posible vinculación, dadas premisas determinantes en la actualidad, tales como la necesidad de comprender la importancia de la ciencia para el desarrollo del país, así como el enorme crecimiento que ha experimentado el conocimiento de la biología durante el último siglo.
A su vez, la doctora Carmen Larrañaga, directora del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Facultad de Medicina, destacó la convocatoria del encuentro y la contribución que significaría dicha asociación en cuanto a la formación de los profesores y a las nuevas generaciones de estudiantes.
Ese mismo derrotero tomaron las palabras del doctor Nicolás Giuliani, académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile, quien se refirió al acercamiento que se puede hacer de la ciencia a la ciudadanía a través de los establecimientos escolares, y las del profesor Antonio Said, de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación.
Posteriormente, los profesores de enseñanza media asistentes al encuentro dieron testimonio del avance que ha significado para sus respectivos establecimientos educacionales participar en programas como los de Laboratorios Portátiles; cómo esta experiencia ha llevado a varios jóvenes a decidirse por estudiar carreras de las áreas de la ciencia y de la salud y, por último, lo beneficiosa que sería para los escolares del país la creación de una asociación como la propuesta.