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Así lo destacó en la ceremonia de graduación del 13 de octubre de 2017 el director de la Escuela de Terapia Ocupacional, profesor Diego Cifuentes: “Nos llena de orgullo verlos partir y empezar un nuevo ciclo de sus vidas, porque parte de nuestro trabajo depositado en ustedes es que sean los mejores profesionales al servicio de nuestra disciplina. Entre todos hemos construido esta comunidad, y es por eso que todos dejan algo en cada uno de nosotros; nunca los olvidaremos, pues hemos aprendido de ustedes y nos dejan tremendos legados en lo estudiantil y en lo personal. Seremos una mejor escuela gracias a este aporte”. A ello, añadió que “están egresando de una carrera que está acreditada por siete años; eso les abre las puertas de postgrados, para seguir otros caminos de formación. Es un sello institucional que sustenta su inserción en el mercado laboral, y es una impronta de experiencia detrás de lo que hacemos; el ser críticos con su ejercicio profesional, con sus perspectivas de la realidad que pretenden modificar, esa es una marca que no conseguirán en otra parte”.
Posteriormente, y a nombre de la generación 2016, se dirigieron a los presentes los terapeutas ocupacionales Cristóbal Catalán y Patricio Herrera, quienes recordaron los inicios de su formación como estudiantes de la carrera, las dificultades que supuso para ellos el cambio curricular al año siguiente de su ingreso y los poderosos vínculos que establecieron entre compañeros y con sus profesores y funcionarios de la escuela. Asimismo, entregaron un reconocimiento a la profesora Constanza Briceño por su dedicación y entrega.
Contribuir a la construcción de la sociedad
Por último, el decano de la Facultad de Medicina, doctor Manuel Kukuljan, dijo a los presentes que “este logro individual, en el cual cada uno de ustedes ha podido demostrar y probar sus talentos y capacidades, sólo es posible debido a que existe un tejido social que no empezó hace poco, sino que hace muchas décadas y hace casi un par de siglos en el caso de la Universidad de Chile. Esta construcción social se ha servido de los esfuerzos, logros, visiones y ambiciones de millones de personas que constituyen una sociedad que trasciende con mucho a la comunidad de nuestra institución, y que da cuenta del país completo. Esto nos hace sentir gratitud hacia toda esa trama social, así como hacia la familia, profesores, compañeros y amigos, hacia los pacientes; pero también debemos pensar cómo devolvemos esas oportunidades, convencidos de que esta trama social sólo tiene que enriquecerse y crecer, y cómo contribuimos a ello, de manera que siga dando una mejor vida a todos. Ustedes están capacitados para ser los mejores terapeutas ocupacionales del país, y también han vivido la experiencia de estar insertos en una comunidad que acepta la diversidad, la fortalece y cultiva, donde cada uno puede contribuir a la construcción de este futuro desde sus diferentes perspectivas; los invito a reflexionar acerca de cómo quieren seguir contribuyendo más allá de su profesión. Cómo, a partir de esta experiencia y esta universidad, hacemos una mejor sociedad”.
Durante la actividad fueron distinguidos la terapeuta ocupacional Katherine Silva, como mejor rendimiento académico, y Cristóbal Catalán como mejor compañero.