“Creemos que los estudiantes son un aliado fundamental para las tareas institucionales, debido a los buenos resultados que arroja en el efecto par en el aprendizaje y también por el compromiso que demuestran en las tareas que asumen. Esta incorporación es, asimismo, continuar con un modelo de “students task force” que nos gusta desde hace mucho tiempo, referido a contar con un grupo importante de estudiantes en el soporte de distintas tareas; en particular, no solamente respaldar el aprendizaje de compañeros de cursos inferiores, sino también ayudar, acompañar y apoyar las actividades de los profesores en el proceso de su práctica docente propiamente tal, ya sea en áreas como la creación de objetos digitales, de actualización de las guías de estudio o de investigación en práctica docente, entre muchas otras cosas. El Programa de Ayudantes Docentes se ha ido legitimando, desde su creación como un proyecto permanente de la Dirección de Asuntos Estudiantiles, en su capacidad de apoyo a las labores docentes en sí; entonces, dada la mirada más moderna que estamos intentando dar de la docencia a partir de la innovación curricular, creemos que esta alianza será un gran aporte a toda nuestra gestión”, explica la profesora Verónica Aliaga, directora de Pregrado de la Facultad de Medicina.
Marcos Rojas, estudiante de sexto año de Medicina, creador del PAD en el año 2014, explica que en esa oportunidad obtuvieron el respaldo financiero y de gestión de la DAE, “pero posteriormente sentimos que nos faltaba un trabajo más codo a codo con los docentes, por lo que estimamos que sería importante dejar de ser un programa permanente a institucionalizarnos de manera definitiva. Así fue como nos decidimos a acercarnos a la Dirección de Pregrado, por su trabajo directo con las escuelas y con los profesores, y al ver que podríamos tener una buena acogida, sometimos a votación entre todos los ayudantes docentes -que al momento eran 381, en 38 ayudantías de las ocho carreras de pregrado; para el primer semestre de 2018 ya cuentan con 459-, el posible ingreso a esta dependencia, y fue aprobado por el 88% de los votos. Es por esto que ahora estamos en pleno proceso de migración”.
Apoyando e innovando
El PAD, informa, comenzó su existencia trabajando con las asignaturas, apoyando las actividades presenciales. “Ahora estamos diversificándonos hacia un modelo de seguimiento docente, enseñándoles a los académicos distintas cosas que quieran aprender y elaborar con nosotros, también en las áreas de investigación, innovación y extensión, pero siempre en el ámbito docente. Nuestros ayudantes tienen muy buena disposición, los estudiantes tenemos mucha flexibilidad para hacer cambios y dar ideas, con proactividad y dispuestos al debate: por ejemplo, pensamos en la posible revisión y sistematización de controles, en hacer alianzas con otras facultades y centros, para que todo lo que hagamos impacte en el aprendizaje positivamente”.
De esta forma, su modelo de trabajo estipula que los docentes interesados en trabajar con ellos, deben inscribirse en el PAD especificando qué tipo de apoyo es el que necesitan, en qué área, y nosotros vemos nuestra disponibilidad de ayudantes, los capacitamos para cumplir específicamente ese requerimiento y se pone a disposición del profesor.
¿Tienen relación con el Departamento de Educación en Ciencias de la Salud, en términos de su interés por innovar en las metodologías de enseñanza?
Nuestro vínculo con el DECSA nos ha ayudado mucho en términos de acceso a tecnologías audiovisuales, pero queremos ver cómo involucrarnos más con ellos. Hemos trabajado en base a proyectos específicos y hemos ayudado a mejorar ciertos procesos, como la unidad audiovisual, a participar de nuestro proyecto “Coursera”. Pero es una de nuestras tareas pendientes, ver cómo mejoramos y sacamos más provecho de esa relación. Y, además, anualmente nos dan dos becas para cursar el Diploma en Ciencias de la Educación, para dos de nuestros ayudantes, y así puedan formarse para ser docentes de la facultad, logrando impactar en nuestra cultura formativa.
Como ejemplo de innovación, Marcos cuenta que el PAD, junto a Pablo Gálvez, docente de la Escuela de Obstetricia, con el apoyo del Centro de Enseñanza de la Facultad de Economía y Negocios, FEN, así como del Decsa, realizaron el primer curso en español en la plataforma “Coursera”. “Creada en 2012 por parte de académicos de la Universidad de Stanford, son cursos masivos abiertos online, hasta ahora en inglés, que pueden ser de la malla curricular, de extensión o en cualquier temática, para que cualquier persona que domine el idioma, en todo el mundo, pueda seguirlo de forma gratuita. Es una oportunidad de transformar las asignaturas en un modelo no presencial de forma económica, rápida, eficiente y de calidad. La Universidad de Chile se unió el 2016 a Coursera y, en el caso de nosotros, todo partió cuando empezamos a trabajar con el Centro de Enseñanza y Aprendizaje de la FEN y vimos que ellos podían capacitar a nuestros ayudantes para formarlos como “productores coursera”. En nuestra facultad, Coursera está alojada en la Dirección de Extensión, que se encarga de aprobar las convocatorias y los cursos; nosotros proporcionamos a los ayudantes-productores que hacen el seguimiento del curso hasta que está subido a la plataforma y toda la tecnología es parte de la unidad audiovisual del DECSA. Así fue como recién terminamos de grabar el primer curso, que es “Cuidados del recién nacido”, que es el primer curso hablado en español para el área de la salud de toda la plataforma, por lo que va a beneficiar a muchos profesionales de Latinoamérica. Y estamos trabajando en cinco más”.
De este modo, finaliza, es que han trabajado en la profesionalización del PAD, “trabajando con evidencias. Por ejemplo, sistematizar la toma de decisiones en base a indicadores de gastos, evaluaciones y solicitudes recibidas. Gracias al mismo Centro de Enseñanza y Aprendizaje de la FEN, ahora gestionamos nuestras actividades y finanzas a través de un panel de control –o “dashboard”- que permite a los ayudantes y funcionarios del programa manejar sus labores y tareas y, a los directores, organizar los trabajos, solicitudes, compras y obtener la información necesaria para decidir en base a los antecedentes recopilados. Y todo eso fue con costo cero, en base a recursos que ya tiene la Universidad de Chile”. Por último, informa que cuentan con un dinámico boletín electrónico mensual, en el que dan cuenta de sus actividades a todos los miembros de su comunidad.