Ir al contenido
English

Más noticias

La profesora Paola Cáceres abordó el tema de la medicina culinaria, como una disciplina basada en la evidencia orientada a fusionar las artes culinarias con las ciencias de la nutrición y la medicina

Lo sano y lo rico van de la mano

La salud sobre la mesa

Con invitados que protagonizan las redes sociales se realizó el Primer Seminario de Técnicas Culinarias “Gastronomía con sentido: nutrición, salud y sustentabilidad” en la Facultad de Medicina.

La Doctora Viviana Guajardo expresó que “este espacio busca visualizar, reflexionar y movilizar acciones correctas en torno al bienestar de nuestra comunidad universitaria

Presentaron actualización de protocolo para la Atención de Estudiantes en este ámbito

Estrategia de Salud Mental: por el bien de todos

Dando a conocer diversas iniciativas dirigidas a estudiantes, funcionarios y académicos, la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile conmemoró el Día de la Salud Mental, en un encuentro triestamental realizado el 17 de octubre de 2025.

En el año 1985 el profesor Alberto Rodríguez Torres creó el Programa de Donantes de Cuerpo en la Facultad de Medicina, según el cual en forma espontánea los que así lo deseen contribuyen a la docencia

Programa de donación de cuerpos

En la base de la enseñanza de la anatomía

Debido a un cargamento de piezas cadavéricas que intentó internar, a fines de septiembre y desde Estados Unidos, el Centro de Entrenamiento Médico Quirúrgico (CEMQ), entidad privada con sede en Las Condes, se hace más evidente la regulación que debe tener el uso de este material con fines docentes. Y, según explica el doctor Julio Cárdenas, director del Museo de Anatomía de la Facultad de Medicina, esta debiera estar en manos de las universidades.

Derechos e inclusión

Jornada Salud Trans Para Chile: Una salud que abrace las diferencias

El pasado jueves 9 de octubre, el Aula Magna doctor Gabriel Gasic de la Facultad de Medicina fue sede del Tercer Encuentro Territorial “Salud Trans para Chile”, jornada que reafirmó el compromiso entre la academia, los gremios y las organizaciones sociales por avanzar hacia un sistema de salud con enfoque de derechos, inclusivo y respetuoso de las diversidades.

El profesor Óscar Jerez, director de LatinSoTL, junto a los estudiantes participantes en el encuentro.

Encuentro se realizó entre el 1 y 3 de octubre

Estudiantes destacaron en Congreso LatinSoTL 2025

Dos equipos de alumnos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile participaron de manera presencial en el III Congreso Latinoamericano y del Caribe de Investigación en Educación Superior, LatinSoTL 2025, realizado en San José, Costa Rica.

La generación 2024 de terapeutas ocupacionales de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile

Generación 2024

46 terapeutas ocupacionales reciben su título profesional

La graduación se realizó el 10 de octubre del 2025, presidida por el decano de la Facultad de Medicina, doctor Miguel O’Ryan; el vicedecano y ministro de Fe de esta ceremonia, doctor Juan Pablo Torres; la directora de Pregrado, profesora Marcela Díaz; el director de la Escuela de Terapia Ocupacional, profesor Óscar Hernández y el subdirector de esta unidad, profesor Ricardo Banda.

Dra. Vania Martínez

"Tenemos que escuchar a los adolescentes"

"Tenemos que escuchar a los adolescentes"

“Un tratamiento bien llevado en este grupo de edad va a tener un impacto significativo en evitar consecuencias a más largo plazo, o que ciertas enfermedades se hagan crónicas”, sentencia la doctora Vania Martínez. De esta forma, la académica del Centro de Medicina Reproductiva y Desarrollo Integral del Adolescente, Cemera, coincide con el diagnóstico de la Organización Mundial de la Salud (OMS) dado a conocer con motivo del Día de la Salud Mental, el que informa que la mitad de las enfermedades en este ámbito comienzan antes de los 14 años, pero que la mayoría de los casos no son detectados ni tratados. Plantea que hay un subdiagnóstico, debido a múltiples barreras existentes.

“La primera es el estigma. Cuando se sabe que alguien tiene un diagnóstico de salud mental le dicen que está loco y hacen bromas al respecto. Hay un enorme desconocimiento de lo que significa tener una patología o una condición de este tipo; por eso es importante educar a la población, para que valoren la salud mental tanto como la física, que vean que no es tan distinto. Es necesario sensibilizar a la comunidad”, señala.

Ese desconocimiento respecto a la enfermedad también se refleja en el propio adolescente y su familia, porque cuando éste llega a pensar que puede necesitar ayuda, él mismo y sus padres primero se preguntan si esa situación es propia de esta etapa de cambios. “A la gente adulta le cuesta darse cuenta si esto es parte de la normalidad o no y al joven le pasa lo mismo, les es difícil reconocer si lo que le pasa es algo dentro de lo esperable o requiere ayuda. Y aún cuando ya piense que lo que le sucede no es normal, también le cuesta pedir ayuda, porque no sabe cómo ni con quién hacerlo, podría preguntarle a un amigo pero le da vergüenza. Incluso, no sabe pedir hora en un centro de salud, lo que también es una barrera, o le preocupa la confidencialidad, que no todos se enteren de su situación”.

Estas barreras, declara, “las queremos abordar con el equipo del Núcleo Milenio Imhay, y creemos que un avance al respecto sería escuchar más a los adolescentes, porque los profesionales de la salud tendemos a decir qué es lo que necesitan y proponer tratamientos y terapias, pero desde nuestro conocimiento y sin preguntarles a ellos. Ellos tienen mucho que decir en cuanto a cómo se les podría facilitar el acceso y la comunicación con profesionales en el ámbito de la salud mental”.

¿Cómo ayudar a combatir el estigma?

De acuerdo a la especialista, se debe comenzar por sensibilizar y educar a los adultos. “Por ejemplo, si se da una charla en un colegio a los adolescentes y alguno reconoce en sí mismo síntomas de depresión, y va donde sus papás a contárselo, ellos tienen que poder reaccionar apoyándolos y no diciendo las típicas frases de “son cosas de la edad”, o “qué problemas puedes tener tú si yo te doy todo”, o “qué vas a ir a hablar de esto con un extraño””. Luego, señala la doctora Martínez, es muy importante el papel que pueden jugar los medios de comunicación en conjunto con los especialistas del área, informando del tema, dando a conocer factores protectores o de riesgo, aprovechando las oportunidades que se dan con noticias atingentes para profundizar en síntomas, tratamientos y prevención.

Lo mismo debe suceder, añade, a nivel de personal en el área de educación y de la salud, “porque en las mallas de formación de estas carreras descuidamos los problemas de la adolescencia, no se les enseña a reconocer los signos para poder realizar una derivación temprana y oportuna. Hay equipos que se han ido especializando, que hacen control sano y que cuentan con espacios amigables para estos jóvenes y que les va bien porque están capacitados para discriminar los factores de riesgo e identificar cuándo se trata de algo propio de la edad y cuándo se trata de una situación que requiere abordaje en salud mental”.

Por eso, finaliza la doctora Martínez, es fundamental que los adultos que viven en torno a los adolescentes sepan reconocer signos de alerta. “Siempre va a depender de cada caso, en general, lo que puede ser menos evidente para los padres o profesores son los trastornos del ánimo, porque son “internalizantes”, es decir, los adolescentes “los viven hacia adentro”, y esto puede pasar inadvertido. Puede ser que los papás estén más pendientes de si están más irritables o si responden mal, pero si ven que hay cambios en el sueño, en el apetito, tiene dificultad para concentrarse, si ha dicho algo como que les gustaría morirse, o que la vida no tiene sentido, lo ha escrito o lo está expresando en poemas o dibujos, son signos ante los cuales hay que estar alerta. Y en esto tienen un papel muy importante los profesores también, e incluso todo el personal de los colegios, porque son los que ven durante más horas al día a los jóvenes, pueden notar si se aísla, si no se come el almuerzo, incluso si llega a situaciones más graves como provocarse autolesiones”.