Así lo explica la académica de la Escuela de Enfermería Daniela Montecinos, directora del proyecto cuyo equipo está integrado además por los también profesores de esta unidad, como son Roxana Lara –directora alterna de la iniciativa-; Felipe de la Fuente, Matías Faúndez y Alfredo Lorca, junto al académico de la Escuela de Enfermería de la Universidad Mayor sede Temuco, Wladimir Torres.
“El objetivo de este proyecto es identificar las capacidades de liderazgo que autoperciben los estudiantes del último año de formación y que hayan terminado alguno de los internados. Ahí vamos a explorar las experiencias formativas que ellos consideren que han favorecido u obstaculizado el desarrollo de estas capacidades”, señala la docente.
El estudio, agrega, es de corte mixto: “la primera etapa será cuantitativa, con la aplicación de un instrumento con validación internacional y traducido al español con el que preguntaremos a los estudiantes cuáles son sus habilidades autopercibidas de liderazgo, en cuatro áreas, como son planteamiento estratégico, inteligencia emocional, influencia e impacto y trabajo en equipo”.
Luego, añadió, “una vez que sepamos cuáles son las áreas más o menos desarrolladas, vamos a iniciar la fase cualitativa, trabajando con grupos focales integrados con quienes hayan participado de la etapa anterior, explorando qué elementos consideran que han sido favorecedores u obstaculizadores para el desarrollo de estas habilidades”.
En ese sentido, explicó que esta etapa cualitativa permitirá indagar aquellos elementos del proceso formativo que cobran valor en el desarrollo de destrezas de liderazgo de enfermería y comprender el significado atribuido a la experiencia educativa, la que podrían relacionarse con aspectos vinculados a algunos cursos de la carrera o las prácticas clínicas, como también en aspectos personales y/o extracurriculares, como haber participado en cargos de delegados, centros de estudiantes, actividades deportivas, entre otras. “Tenemos que explorar qué es lo que está favoreciendo, ahí está el valor de nuestra investigación, porque lo que reconozcan como válido hay que perpetuarlo y fortalecerlo, y lo que obstaculiza nos va a mostrar las brechas y poder formular planes de mejora”.
El proyecto tiene un año de duración y los resultados se entregarán como insumo para sustentar estrategias educativas que propone ACHIEEN para las escuelas socias; “por eso les pareció interesante este proyecto, pues en el fondo tiene directa relación con políticas públicas en salud. La OMS/OPS ha explicitado mediante distintas campañas el rol que juega la enfermería en la salud global, en la calidad de la atención y para poder acortar las brechas existentes debido a las inequidades: uno de los ejes es fortalecer el liderazgo en nuestra profesión. La formación de pregrado es la etapa ideal para empezar a promover estas habilidades. Por este motivo agradecemos al Departamento a la y Escuela de Enfermería por apoyar el desarrollo de esta investigación, que busca ser un aporte al desarrollo de la disciplina”.