En la instancia participaron la directora de la Escuela de Medicina, doctora Thelma Suau; el subdirector de la misma escuela, doctor Felipe Carrillo; el especialista en psicología de la educación, profesor Óscar Jerez; el especialista en educación quirúrgica, doctor Boris Marinkovic; la coordinadora de la unidad de desarrollo docente, profesora Carolina Figueroa; el coordinador de la unidad de mejoramiento continuo de la educación de la Escuela de Medicina, doctor Álvaro Herrera; estudiantes del Observatorio de Educación Médica; alumnos de la Academia Científica de Estudiantes de Medicina; egresados de la Beca Docente; funcionarios y alumnos de la Escuela de Medicina.
El coordinador de la unidad de mejoramiento continuo de la educación de la Escuela de Medicina, doctor Álvaro Herrera, explicó que la Escuela de Medicina decidió realizar esta instancia dado el contexto que se ha ido evidenciando durante los últimos años: “Como carrera venimos de un proceso de acreditación de 7 años, que en cierta medida da cuenta de que nuestros y nuestras egresadas son un producto de tremenda calidad. Sin embargo, nos hemos dado cuenta de que la docencia ha ido envejeciendo”.
En ese sentido, recalcó que “todo lo relacionado a la carrera académica se ha ido mermando, y esa transición que debiese ser de manera natural, entre la generación más añosa y aquellos que toman la posta en la docencia, no se estaba produciendo correctamente porque nadie estaba tomando ese rol”.
Es por esto que la directora de la Escuela de Medicina, doctora Thelma Suau junto con el equipo de la unidad de mejoramiento de la educación y la unidad de desarrollo docente, planificaron esta actividad como una instancia cuyo “objetivo fundamental fue reflexionar sobre la educación médica actual y vincular el proceso que tuvimos de acreditación, con el proceso de ajuste curricular y la medicina del siglo XXI, y cómo nos preparamos para este desafío”.
Asimismo, añadió que “esta jornada está planificada para ser un insumo, y fue parte de los compromisos que se hacen en la acreditación respecto al plan de formación”.
El trabajo realizado durante la jornada consistió en la división de los participantes en grupos diversos e intencionados, que incluyeron a docentes, egresados y alumnos. Cada grupo se dedicó a crear una propuesta de mejora para la educación médica en la carrera de medicina, que pudiese ser aplicadas en el corto, mediano y largo plazo, en seis diferentes temáticas: Formación integral; Diversidad e inclusión; Calidad educativa; Ética y responsabilidad social; Investigación en docencia; y Desarrollo curricular y ajuste. Los grupos tuvieron tiempo para desarrollar las ideas y posteriormente, presentarlas al resto de los presentes.
Sobre esto, el doctor Álvaro Herrera expresó que “la idea de este enfoque con participantes multisectoriales, fue aunar fuerzas para que en conjunto podamos lograr formar líderes educativos dentro de nuestra escuela, que permitan de alguna manera ser un semillero para el futuro, y que la docencia médica que se investiga y actualiza constantemente se transforme en una cultura permanente, para que así la posta de la educación de calidad pase de unos a otros entre generaciones de forma natural”.
Además, añadió que “uno de los pilares para poder lograr esto se relaciona directamente con la formación docente, y con conversar de forma constante sobre temáticas que tengan que ver con educación médica, con tendencias en educación superior, y desde ahí promover la discusión y reflexión sobre estos temas”.
Asimismo, la doctora Thelma Suau destacó la relevancia de las conclusiones obtenidas del análisis que realizó cada grupo: “Una de las conclusiones importantes a las que se llegó fue que, cuando reflexionamos acerca de en qué época estábamos respecto de nuestras acciones docentes, concluimos que estamos en el siglo XX por la década de los 40, en las formas de nuestras metodologías de educación médica”, señaló.
Al respecto, recalcó que es fundamental actualizar estas metodologías “porque los estudiantes son distintos, y existen metodologías en las cuales hay evidencia de que la formación de los médicos es mucho más efectiva”.
El doctor Álvaro Herrera indicó que “la buena docencia tiene que ver con el acompañamiento estudiantil, con conocer a los estudiantes, ponerlos en el centro, y desde ahí tomar decisiones que permitan que los alumnos logren los resultados de aprendizaje esperados, por supuesto de manera consecuente con el perfil de egreso de nuestra universidad”.
Es por esto que, mediante actividades como esta, buscan “revivir y potenciar la educación médica dentro de la carrera. Ese fue nuestro gran objetivo. Es una cuestión bien difícil, pero teníamos que comenzar por algo, y qué mejor que hacerlo de la mano con nuestros propios estudiantes que son el centro de nuestro quehacer y que son donde nosotros queremos poner las fichas, porque queremos que sean también los líderes del mañana”, recalcó.
La doctora Thelma Suau señaló que la realización de esta Jornada de trabajo en educación médica les permitió “establecer redes intra docentes y estudiantes, las cuales, junto con el trabajo conjunto, nos va a permitir mejorar, para así cumplir con ser la escuela que forme a los mejores egresados, y que entregue a los mejores profesionales que Chile necesita”.
Con respecto a la implementación de las mejoras obtenidas de las conclusiones de la actividad, explicó que “el trabajo de aquí en adelante es ir mirando cuáles son aquellas estrategias que podemos implementar durante el próximo semestre, cuáles vamos a tener que trabajarlas durante el 2024 y hacerlas factibles desde el 2025 en adelante, y cuáles se incluirán en el proceso de ajuste curricular”.