La actividad fue organizada por la Unit of Interventional Pain Practice (UIPP), dirigido por la doctora Eva Mercado, anestesióloga del Hospital Universitario Virgen del Mar de Madrid, España, y contó con un cuerpo docente certificado internacionalmente en técnicas intervencionistas del dolor, las cuales tienen como objetivo que los procedimientos se realicen en forma segura y protocolizada; así, participaron como profesores asociados los doctores Wendy Rojas, especialista de la Clínica Foianini, de Bolivia; Juan Pablo Paladino, del Hospital Pedro Fiorito, de Buenos Aires; Nicole Silva, anestesióloga del Hospital del Salvador y master de la Sociedad Española del Dolor, y Julio Cárdenas, académico del Departamento de Anatomía y Medicina Legal de nuestro plantel.
Al respecto, el doctor Cárdenas explicó que el curso está orientado a ofrecer a los inscritos formación práctica médica de calidad internacional en el tratamiento de los pacientes con dolor crónico, uniendo conocimientos de aspectos básicos y clínicos. Para ello, durante las tres jornadas contaron no solo con apoyo de equipamiento tecnológico de primer nivel, sino que también utilizaron material anatómico obtenido a través del Programa de Donación de Cuerpos del Departamento de Anatomía y Medicina Legal, “pudiendo así replicarse no solo técnicas intervencionistas sino también la mejor identificación de los target o puntos de reparo para el posicionamiento de agujas propias de estos procedimientos, utilizando para ello un material anatómico con el que se logra obtener una sensación táctil de consistencia muy similar a la de un paciente real en sus distintos tejidos y órganos. En ese sentido, la utilización de material cadavérico mejora también la perspectiva y ofrece una visión moderna de la enseñanza de la anatomía en nuestras profesiones del área de la salud”.
El curso intensivo comprende clases en formato de e-learning durante un semestre, además de casos clínicos y evaluaciones en cada módulo. Cuenta con alumnos provenientes de Argentina, Perú, Guatemala, México, Ecuador, Colombia y Chile en esta versión. “De esta manera, el uso de cuerpos donados a la ciencia permite complementar otros recursos frecuentes en la simulación clínica y que son utilizados en distintas etapas de aprendizaje de nuestros alumnos de postgrado”, finaliza el doctor Cárdenas.